Balance de masas con tecnología blockchain: Innovación y transparencia en la cadena de suministro

En una economía que avanza hacia la sostenibilidad, ya no basta con utilizar materias primas recicladas o renovables. Las empresas deben poder demostrar, con datos verificables, cómo y cuándo se han utilizado esos materiales. En este contexto, el concepto de cadena de custodia se vuelve fundamental. Se trata del sistema que documenta y verifica el recorrido de un material desde su origen hasta el producto final, asegurando su integridad, trazabilidad y atribución.

Existen varios modelos de cadena de custodia reconocidos internacionalmente: segregación física, identidad preservada, book & claim, y el que nos ocupa en este artículo, el balance de masas. A diferencia de los modelos que exigen separar físicamente los materiales sostenibles, el balance de masas permite mezclar insumos de distintos orígenes —fósiles y sostenibles—, y luego atribuir proporcionalmente las características ambientales positivas a los productos finales. Esto lo convierte en un método práctico para industrias complejas que trabajan con grandes volúmenes y flujos de producción interconectados.

La norma ISO 22095, publicada en 2020, establece las bases técnicas para los sistemas de cadena de custodia. Define criterios comunes, requisitos de trazabilidad, mecanismos de transferencia de atributos y directrices para auditorías independientes. Dentro de esta norma, el modelo de balance de masas está plenamente reconocido, siempre que cumpla con los principios de contabilidad verificable y evite la doble atribución de créditos sostenibles.

En la práctica, el balance de masas —cuando se implementa bajo un sistema de cadena de custodia conforme a la ISO 22095— permite a las empresas certificar de forma legítima que han sustituido una parte de sus insumos fósiles por materiales circulares, aunque no sea posible distinguirlos físicamente. Sin este marco normativo y metodológico, cualquier afirmación de sostenibilidad quedaría sin respaldo técnico.

Este sistema no solo facilita la transición hacia una economía circular, sino que, combinado con tecnologías emergentes como blockchain y el pasaporte digital de producto, aporta el nivel de transparencia y automatización que exige el nuevo mercado. A lo largo de este artículo, descubrirás cómo el balance de masas, enmarcado dentro de una cadena de custodia robusta y apoyado por estándares internacionales, se está convirtiendo en el método clave para certificar y escalar la sostenibilidad en los procesos industriales.

¿Qué es el Balance de Masas?

El balance de masas es un método contable aplicado en procesos industriales para asignar atributos sostenibles a productos que se generan a partir de una mezcla de insumos. A través de esta metodología, las empresas pueden introducir materias primas recicladas, renovables o de bajo impacto ambiental dentro de una cadena de producción mixta, y luego distribuir esa “sostenibilidad” entre los productos finales, de forma proporcional y verificable.

Este enfoque no exige una separación física entre los materiales fósiles y los sostenibles. Por tanto, es ideal para procesos donde tal segregación no es viable, como en la producción de polímeros, combustibles o compuestos químicos. En estos casos, lo importante no es aislar el material sostenible en el producto, sino garantizar, mediante registros precisos, que se ha incorporado en la producción total.

El balance de masas funciona bajo un principio de equivalencia: si se introducen 100 unidades de material circular en una planta, es posible certificar que 100 unidades de producto pueden atribuir ese contenido sostenible, aunque no se pueda identificar físicamente en cada unidad.

Sin embargo, el éxito de este modelo depende de la credibilidad de los registros y auditorías. Aquí es donde cobra relevancia el concepto emergente de pasaporte digital de producto. Este pasaporte actúa como un documento digital que acompaña a cada producto a lo largo de su ciclo de vida, recopilando datos sobre sus materiales, procesos, origen y trazabilidad. Al integrarlo con el balance de masas, se puede registrar en tiempo real qué cantidad de materia prima sostenible se ha usado, en qué parte del proceso y a qué producto se ha asignado.

En este contexto, el pasaporte digital de producto no solo mejora la trazabilidad, sino que se convierte en una herramienta de transparencia frente al consumidor y los entes reguladores. Permite demostrar que un producto, aunque físicamente indistinguible, tiene una huella sostenible documentada, rastreada y validada a través de toda la cadena de valor.

El balance de masas, potenciado por tecnologías como blockchain y por herramientas como el pasaporte digital de producto, está redefiniendo cómo se certifica la sostenibilidad en entornos industriales complejos, sin comprometer la eficiencia ni la escalabilidad.

Problemas del Balance de Masas Tradicional

Aunque el balance de masas representa un avance importante hacia una producción más sostenible, no está exento de críticas. El principal problema radica en la falta de trazabilidad visible. Dado que los materiales se mezclan durante el proceso y los productos resultantes son físicamente idénticos, no siempre es evidente para el consumidor —ni siquiera para algunos eslabones de la cadena— si un artículo contiene realmente material sostenible o si solo se le ha atribuido virtualmente.

Esta opacidad puede generar escepticismo. Las empresas corren el riesgo de ser acusadas de greenwashing si no respaldan sus afirmaciones con datos verificables. Además, el sistema tradicional de auditoría suele basarse en documentos PDF y hojas de cálculo internas, revisados una vez al año. Esto deja margen a errores humanos, manipulaciones accidentales y, en el peor de los casos, fraudes deliberados.

Ante esta situación, se vuelve crucial reforzar la confianza mediante herramientas digitales que aporten transparencia, integridad y verificación en tiempo real. Aquí entra en juego la tecnología blockchain, y junto a ella, el concepto de pasaporte digital de producto.

Estos pasaportes digitales permiten registrar de forma estructurada y accesible todo el historial de un producto: desde qué materias primas se usaron, cuánta proporción fue certificada, hasta qué procesos atravesó antes de llegar al consumidor final. Cuando esta información se almacena en una red blockchain, se garantiza que no puede ser alterada ni borrada, fortaleciendo la credibilidad de las declaraciones de sostenibilidad.

Además, el pasaporte digital de producto facilita la interoperabilidad entre plataformas y actores de la cadena de valor, permitiendo que todos —desde el productor hasta el minorista— puedan acceder a la misma información verificable, sin necesidad de confiar ciegamente en el proveedor anterior.

Por tanto, el verdadero desafío no es solo contar con un sistema de balance de masas, sino convertirlo en un modelo transparente, trazable y confiable, capaz de demostrar su impacto en cada producto mediante herramientas tecnológicas avanzadas.

Blockchain y Pasaporte Digital de Producto: El Futuro del Balance de Masas

Blockchain ha emergido como una tecnología clave para transformar la trazabilidad en las cadenas de suministro. Su capacidad para registrar información de forma inmutable y descentralizada permite eliminar dudas sobre el origen, la cantidad y la sostenibilidad de los materiales usados.

Aplicada al balance de masas, blockchain actúa como un libro contable digital compartido. Cada transacción —desde la entrada de materia prima hasta la asignación final al producto— se almacena de forma segura y verificable. Esto refuerza la confianza en los datos y reduce el riesgo de fraude o errores contables.

El uso de pasaportes digitales de producto potencia aún más este enfoque. Asociados a un lote o artículo, permiten conocer en tiempo real qué proporción de materiales certificados contiene, de dónde vienen y cómo fueron procesados.

Además, los smart contracts automatizan la validación de datos, evitando la doble contabilización de créditos sostenibles y garantizando transparencia en toda la cadena de valor.

En resumen, blockchain no reemplaza al balance de masas: lo fortalece, lo digitaliza y lo vuelve incuestionable.

¿Cómo Funciona la Integración Blockchain + Balance de Masas?

Integrar blockchain al balance de masas transforma un sistema contable tradicional en una estructura digital, trazable y automatizada. La lógica sigue siendo la misma: se registra cuánta materia prima sostenible entra en el sistema y se asigna proporcionalmente a los productos finales. Sin embargo, con blockchain, cada paso queda validado y documentado en tiempo real.

El proceso comienza con el ingreso de materiales certificados. Estos se tokenizan, es decir, se les asigna un activo digital único que representa su volumen, tipo y origen. A medida que avanzan por la cadena de producción, estos tokens son transferidos y actualizados automáticamente mediante smart contracts, reflejando su transformación sin perder el historial.

Cuando un producto final se fabrica, se le vincula un pasaporte digital de producto, que consolida todos los datos trazables: desde el porcentaje de contenido reciclado o renovable, hasta el sitio y fecha de procesamiento. Toda esta información se almacena en la blockchain, donde no puede ser alterada, falsificada ni perdida.

Este modelo tiene varias ventajas prácticas:

Garantiza que no se vendan más productos sostenibles de los que realmente se han producido.
Asegura transparencia entre múltiples actores sin necesidad de confiar ciegamente en ninguno.
Reduce los costos y tiempos de auditoría gracias a la verificación automatizada.

En esencia, blockchain no cambia el balance de masas; lo vuelve visible, confiable y auditable sin fricciones. Es la infraestructura que le da vida digital a un sistema que hasta ahora dependía de documentos internos y confianza tácita.

Ventajas de combinar Blockchain con Balance de Masas

La integración entre blockchain y el balance de masas no solo mejora la trazabilidad; redefine completamente la manera en que gestionamos, auditamos y comunicamos la sostenibilidad en productos industriales. A continuación, se presentan sus principales ventajas:

Transparencia y Trazabilidad
Registro inmutable: Cada transacción o movimiento de materiales se registra en un libro mayor inmutable. Esto asegura que toda la información sobre el uso de materiales sea precisa y verificable en cualquier momento.
Acceso distribuido: Todos los participantes de la cadena de suministro tienen acceso a la misma información, eliminando discrepancias y mejorando la confianza entre las partes.

Seguridad y Fiabilidad
Protección contra manipulaciones: La naturaleza descentralizada de la blockchain hace que sea extremadamente difícil alterar los registros, garantizando la integridad de los datos.
Auditorías simplificadas: Con registros inmutables y accesibles, las auditorías pueden realizarse de manera más eficiente y con mayor confianza en la veracidad de los datos.

Eficiencia y Reducción de Costos
La evolución del balance de masas ya no depende solo de la contabilidad interna ni de certificados aislados. Con la digitalización y la presión regulatoria, el modelo avanza hacia un entorno más dinámico, colaborativo y transparente. El balance de masas digital, potenciado por blockchain y los pasaportes digitales de producto, marcará el estándar en trazabilidad industrial.

En los próximos años, veremos un cambio estructural: los sistemas de producción ya no se medirán únicamente por eficiencia o volumen, sino también por la capacidad de demostrar impacto ambiental positivo con evidencia verificable. Las cadenas de suministro serán auditadas en tiempo real, y los consumidores podrán escanear un producto y ver toda su historia material con un clic.

Además, los pasaportes digitales serán obligatorios en muchas industrias bajo nuevas directivas europeas, exigiendo a las empresas no solo actuar de forma sostenible, sino también probarlo con datos accesibles, estandarizados y seguros.

Este nuevo paradigma exigirá cooperación multisectorial, inversión en tecnología e integración con otras herramientas como el Internet de las Cosas (IoT), inteligencia artificial y gemelos digitales. Pero también abrirá puertas: nuevos modelos de negocio, incentivos fiscales, confianza del consumidor y diferenciación real en mercados globales.

En definitiva, el futuro del balance de masas no es solo una evolución técnica, sino una oportunidad para redefinir la producción responsable desde su base: con transparencia, trazabilidad y tecnología al servicio del planeta.

Desde Blue Room Innovation, ayudamos a empresas que buscan implementar soluciones reales de trazabilidad, sostenibilidad y transformación digital. Combinamos nuestra experiencia en tecnologías como blockchain, IoT y pasaportes digitales de producto con un profundo conocimiento del modelo de balance de masas para ofrecer soluciones personalizadas, auditables y listas para escalar.

Si tu organización quiere liderar el cambio hacia una economía más transparente, circular y preparada para las nuevas regulaciones europeas, estamos aquí para acompañarte. Contáctanos y descubre cómo podemos transformar tu cadena de valor con tecnología, innovación y sostenibilidad.